Entrevista a César Puerta, Senior Staff Software Engineer en Twitter
29 mayo, 2018

El secreto de la transformación digital

La transformación digital es aún una cuenta pendiente entre las empresas españolas. De hecho, siete de cada 10 profesionales aseguran que los nuevos modelos digitales les resultan desconocidos, según un estudio de ThePowerMBA, un programa de negocio online creado por directivos y emprendedores de éxito. El informe, que ha sido elaborado contando con más de 5.800 empresarios y directivos de entre 25 y 45 años este año, refleja, entre otros datos, que el 40% de los encuestados no sabe cómo gana dinero Facebook.

Esta desinformación tecnológica es una tendencia superior en compañías tradicionales, frente al crecimiento exponencial de las startups, que apuestan al 100% en implementar la transformación digital desde el inicio, formando a sus empleados e integrando software de última generación en sus equipos. De hecho, se estima que el 90% de las pymes emergentes prevén aumentar su plantilla durante este ejercicio y, ocho de cada 10 emprendedores optarán por crear una startup. Tal es así el desconocimiento en algunas empresas nacionales, que el 70% no sabría distinguir entre un modelo de negocio tradicional o lineal frente a las nuevas estrategias de las ecommerce, aplicaciones móviles o plataformas online como Amazon.

La reducida transformación digital de las pymes españoles se contrarresta con el uso elevado de nuevas tecnologías en la vida privada de los profesionales. Las nuevas herramientas aún crean vértigo en numerosas compañías y optan por utilizar programas ‘conocidos’ antes que plataformas ubicadas en la nube, por ejemplo. Debido a ello, hay un uso más elevado de software o aplicaciones móviles en el entorno personal, siendo más fácil extender un producto social que laboral. Hay una progresiva concienciación tecnológica fuera del entorno profesional.

En ese sentido, las empresas necesitan cambiar su estrategia de negocio tradicional y adaptarla a los nuevos tiempos. Esta transformación digital debe alcanzar a todos los departamentos de la compañía, desde Recursos Humanos, Innovación hasta Comercial y Ventas. Sin embargo, la revolución tecnológica de las empresas no está teniendo en cuenta a su propio equipo humano, que carece de voz y voto, siendo imprescindible la visión individual de cada una de las personas que forman la estructura de la compañía frente a los nuevos cambios tecnológicos.



¿Cómo mejorar la actitud de los trabajadores de una empresa que aspira a ser digital?


Empezando desde cero, con departamentos de formación que apoyen y eduquen a los empleados en el entorno digital, ayudándoles en cada uno de los pasos. Asimismo, la entidad debe crear visibilidad de todos los procedimientos tecnológicos de la compañía para que la implementación digital no genere rechazo entre los empleados y éstos sean agentes activos del cambio durante todo el proceso. La confianza generada entre los trabajadores dota a la estructura de la empresa de una mayor rapidez en la integración de soluciones digitales y también mejora el estado de ánimo. La formación provoca una actitud positiva en los empleados, que observa que la entidad se preocupa y piensa en ellos para el cambio, mejorando su conocimiento y concienciación en cada uno de los pasos tecnológicos. Este proceso provoca otro valor positivo en el equipo humano, ya que hay un mayor rendimiento en el trabajo gracias a la mano de confianza recibida por los superiores. Por otra parte, los directivos, decisionarios y los directores del departamento de Innovación también deben estar formados y concienciados de que la transformación digital en las empresas no depende de la compra de las últimas innovaciones de software y hardware, sino más bien de la actitud que las personas tienen ante la tecnología y los cambios a los que esta nos impulsa... Afortunadamente, hay ya herramientas en España como la Academy de Netexplo que ayudan a los directivos a solventar posibles resistencias de los empleados hacia el cambio tecnológico y que ayuda en todo el proceso al personal para mejorar su rendimiento, aportando valor añadido a la empresa.

De este modo, se inicia el primer paso hacia la transformación de la compañía con el objetivo de lograr una cultura o ADN digital. La digitalización genera, además, un extra de confianza entre los clientes, que observan a una empresa puntera en innovación, ayudando a aumentar su cartera de clientes.

Así, se dejaría atrás la idea de que el rendimiento digital se logra rápidamente con nuevos empleados formados, con la compra de nuevo software, o contratando expertos de otras entidades, en lugar de formar y crear un clima digital entre los empleados. La apuesta de la empresa por su capital humano genera una actitud positiva y mejora el rendimiento laboral de los trabajadores, creando más beneficios y dejando atrás miedos, como es la inestabilidad laboral o el desconocimiento de los retos de la de la empresa.